Ir al contenido principal

Oración del sábado: «Soy yo, no teman»

 


Amado Dios, hoy me despierto lleno de dicha y emoción a darte gracias porque un nuevo amanecer ha llegado. Qué hermoso es poder despertar, abrir los ojos y disfrutar de tu maravillosa creación

Gracias porque tengo un hogar para descansar, porque hay comida en mi mesa, y zapatos en mis pies. Me has dado una bella familia y en cada instante de mi vida puedo sentir tus hermosas bendiciones a mi alrededor.

Señor, en este sábado acudo a Ti para entregarte mis luchas, mis necesidades, mis problemas y también mis ilusiones. Es en Ti donde están mi vida, mi esperanza y mis más grandes victorias, pues yo soy cómo aquel campo de trigo, que solo bajo tus cuidados puede dar abundante cosecha.

Te ofrezco todos mis pensamientos, palabras y acciones de este día, Permíteme ser un humilde instrumento de tu obra y dame la dicha de compartir mis bendiciones con aquellos que más lo necesitan.

Me pongo en tus manos Señor y en tus manos también pongo la vida de mi familia y las personas que amo. Por favor cúbrenos con tu hermoso manto de luz y de amor, ilumina nuestro camino y guía nuestros pasos por senderos de dicha, triunfos y milagros.

Nuestros días solo son plenos y felices si Tú estás con nosotros, por favor nunca te apartes de nuestra vida.

Y si en algún momento tuviésemos que enfrentar pruebas o dificultades, te pido que nos des la fuerza y la fe necesarias para seguir adelante, y permítenos comprender que aquello que hoy parece una prueba, muy pronto habrá de convertirse en la base de una gran bendición.

Amado Dios, hoy declaro con amor que este será un día feliz, lleno de dicha y bendiciones, pues Tú estás a mi lado y donde Tú estas, nunca falta absolutamente nada, Amén.



Comentarios

Entradas populares de este blog

Oración: El Padre Nuestro

Aunque la oración primera de los niños que residen en hogares católicos es aquella que clama por al amparo del Ángel de la Guarda, la plegaria por excelencia -inspiración y núcleo de la celebración eucarística- es el Padrenuestro. EL AVE MARÍA  Dios te salve, María;   llena eres de gracia; el Señor es contigo;  bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre,  Jesús. Santa María, Madre de Dios,  ruega por nosotros, pecadores,  ahora y en la hora de nuestra muerte.  Amén. 

EL SABIO DE LA MONTAÑA

Todos los días temprano en la mañana los dos pescadores atravesaban la montaña para llegar al río. Cierto día decidieron cambiar el recorrido porque después de tantos años haciendo el mismo camino estaban aburridos de ver siempre lo mismo, los mismo árboles, los mismos pájaros, las mismas flores, hasta el viento parecía ser el mismo. De todas formas tenían que atravesar la montaña pero lo hicieron por otro camino, llevaban un buen trecho cuando vieron un hombre sentado sobre una roca mirando al horizonte, pensando y ajeno a la presencia de ambos. Los pescadores pasaron por él, el hombre no movió ni un músculo y ellos siguieron su camino. Después de un largo día de trabajo los pescadores regresaron por el mismo camino, allí seguía el hombre, en el mismo lugar. Al otro día, nuevamente tomaron el mismo camino, el hombre estaba allí, ellos seguían su rutina, día tras día. Así pasaron los días, semanas y meses hasta que uno de los pescadores curioso le dijo al otro: -Hoy voy a habla...

SALMO 91

1      El que habita al abrigo del Altísimo        morará bajo la sombra del Omnipotente. 2      Diré yo de Jehová: Refugio mío y fortaleza mía;        mi Dios, en quien confiaré. 3      Porque él te librará de la trampa del cazador,        de la peste destructora. 4      Con sus plumas te cubrirá,        y debajo de sus alas hallarás refugio;        escudo y adarga es su verdad. 5      No temerás el terror nocturno,        ni la saeta que vuele de día, 6      ni la pestilencia que ande en la oscuridad,        ni la plaga que en pleno día destruya. 7      Caerán a tu lado mil,y diez mil a tu diestra;        mas a ti no llegará. 8      Ciertamente con ...