Aunque la oración primera de los niños que residen en hogares católicos es aquella que clama por al amparo del Ángel de la Guarda, la plegaria por excelencia -inspiración y núcleo de la celebración eucarística- es el Padrenuestro. EL AVE MARÍA Dios te salve, María; llena eres de gracia; el Señor es contigo; bendita Tú eres entre todas las mujeres, y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús. Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
En la vida hay que pasar páginas, cerrar libros y a veces hasta clausurar bibliotecas.
Comentarios
Publicar un comentario